Llegamos al día 38 de confinamiento. Al parecer la tasa de mortalidad sigue descendiendo en España y es una excelente noticia, más allá de que en este país, por lo visto, todo se ha hecho mal en lo que respecta a esta pandemia. Desde el principio, el Gobierno ha cometido errores en todos los frentes. Es impresionante el mal manejo que han hecho.
Pero hoy, lunes 20 de abril, he decidido cambiar el enfoque porque estoy en mi “semana aniversario”. Es decir, esa semana en la que me pongo un año más viejo. Por cierto, no entiendo por qué las personas celebramos tanto el hecho de que cada día estamos más decrépitos, destruidos y anulados por el paso el tiempo. Creo que es una forma psicológica de hacernos sentir a nosotros mismos felices por eso, por lo tanto, lo veré así; como que el recordatorio de que estoy cada día más cerca de ese momento en el que seré de nuevo como un bebé (cagado, meado, usando pañales y comiendo sólo alimentos líquidos y papillas).
De todas formas, como aún espero que me falten muchos años para que llegue ese momento, he decidido celebrar y dar esta semana noticias positivas, mayoritariamente. Por otro lado, puesto que, al parecer, ya estamos en dictadura y la Guardia Civil está trabajando para «minimizar» las críticas al Gobierno (según indicó ayer el Jefe de dicho Cuerpo), puede que deje de decir todo lo que pienso.
Que locura. Salir de una dictadura en la que si decías algo que al régimen no le gustaba, iban a tu casa a buscarte para meterte preso sin aviso y sin protesto… Para llegar a otra donde, si nos descuidamos, a fin de año muchos podríamos estar en la cárcel por nuestras ideas “contrarrevolucionarias” porque, para ese momento, si España sigue como va será una “revolución”, ¿no?
Entre otras noticias positivas tenemos que, como les dije, esta es mi semana de cumpleaños (cumplo el sábado) y durante estos días me pongo a pensar en cuál será el apellido de la revolución de Sánchez e Iglesias. Me explico, la dictadura venezolana se autodenominaba “Revolución Bolivariana”, la de Rafael Correa era la “Revolución Ciudadana”, la de Daniel Ortega es la “Revolución Sandinista” y así muchos otros.
¿Aquí cómo será?… ¿Revolución Ibérica?… ¿Revolución de la Luz?… Me gustaría saber sus opiniones respecto al nombre que debería tener la revolución aquí. Si de algo estoy seguro es de que no será “Revolución Española”, porque sería impensable faltarle el respeto a los separatistas que detestan el nombre de “España” (¿no te jode?)
De lo que sí pienso seguir hablando es de España, de esta tierra maravillosa, ancestral, imperial, histórica, referente cultural de la humanidad, cuna del idioma más bonito del universo (el castellano) y también lugar de origen del jamón ibérico, de la tortilla de patatas, de los churros con chocolate y, por supuesto, de los maravillosos vinos de Rioja y de la Ribera del Duero, que cada día son más reconocidos en el mundo por su excepcional calidad.
Hablando de vinos, ayer pedimos unos Riojas (muy buenos y a excelente precio) que tienen en la tienda de La Plaza de Dia y nos llegaron hoy por Amazon Prime Now. Cuando el chico dejó el pedido en el pasillo nos dimos cuenta (mientras iba rumbo a las escaleras y nosotros abríamos la puerta) de que él mismo ya nos había traído antes, varias veces, durante la cuarentena… Y justamente se voltea y nos dice: “Hola, buenas tardes, les he traído más vino”, con una carcajada. Que ilusión me da ver que las personas siguen manteniendo el buen humor dentro de esta situación.
Eso es lo más importante. Aunque muchos han tenido que partir, los que aquí seguimos debemos recordar que la vida es bella, que hay muchas cosas por las que vale la pena vivir, que mientras la Tierra siga girando, tenemos que seguir adelante, que hoy hace lluvia, pero mañana saldrá el sol y todos tenemos capacidades, talentos y potencial para lograr cosas maravillosas (votar por la izquierda no es lograr algo maravilloso, sino todo lo contrario).
A pesar de todo, hay que mantener la mente positiva porque de esta vamos a salir y mi plan, en lo personal, es seguir en España, trabajando duro por este país, por mi familia y orientando a todo el que se quiera mudar, de forma legal, a este país.
Como bien saben todos (pero nunca está de más repetir) no apoyo, desde ningún punto de vista y en ninguna circunstancia, la migración ilegal. Siempre he pensado que irte a otro país a estar allí en situación irregular no solo es extremadamente duro, difícil y estresante para quien lo hace; sino que además es como irrumpir y meterte a vivir en la casa de otro sin su consentimiento.
Antes de despedirme por hoy, les contaré la anécdota de María José del día… porque volvió a salir al supermercado. Debo confesar que quien sale es ella y yo me quedo como “amo de caso” esperando que vuelva, con todo listo para que, mientras ella se ducha, yo voy ordenando la compra, lavando bote por bote, guardándolo en su sitio y luego haciéndole la comida, es lo que debe hacer un buen “amo de caso”, ¿no?
Hemos decidido que ella es quien sale por una razón básica y principal. A mi me da igual pasar dos días o dos meses encerrado en casa, pero ella necesita caminar, salir, pasear, ver gente a pesar de que cada vez que llega del super dice con voz de terror y angustia: “No vuelvo a salir, nadie respeta la distancia de seguridad en la calle”.
De hecho, en mi Live de YouTube de hoy, que pueden ver en el video que está debajo de está línea en mi canal “Enrique en Vivo” (al que pueden suscribirse pinchando aquí), ella va a echar el cuento de cómo fue salir y las “vicisitudes” que sufrió durante su “paseo” al supermercado.
Recuerda, mi nombre es Enrique Vásquez y soy abogado de extranjería estudiado y colegiado en España, para información migratoria escríbenos a www.yoemigro.com/contactanos.
En nuestro despacho también ofrecemos seguros de salud, decesos, vida y mascotas. Escríbenos a www.yoemigro.com/contactanos.
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