Tips para ahorrar electricidad en Panamá

Al igual que en la mayoría de los países del mundo, la electricidad en Panamá es cara; y cuando digo «cara» me refiero a que, si te descuidas, el recibo puede salirte por 200 dólares o más (y vaya eso que eso es una gran cantidad de dinero).

Si vienes de Venezuela, lo más seguro es que entres en shock cuando te llegue el primer recibo. No entenderás lo que ocurre y muy probablemente querrás salir corriendo pegando gritos a la calle, porque pensarás que es inaudito que te cobren tanto por un servicio básico como lo es la corriente eléctrica. Por eso hoy te traigo estos tips para ahorrar electricidad en Panamá.

De antemano te digo que no es que en Panamá sea cara la luz, sino que en Venezuela es demasiado barata. De hecho, en Europa es mucho más costosa que en Panamá, por lo que la única solución que tienes es comenzar a ahorrar electricidad y, como yo sé que los venezolanos hace mucho que perdimos la cultura del ahorro energético, hoy te voy a comentar algunos tips que me han ayudado mucho, tanto que ahora mi recibo no pasa de 70 dólares al mes (de hecho, en marzo, que prácticamente nunca prendí el aire acondicionado, me salieron 18 dólares de luz).

Lo primero es la zona donde vivas. No me consta, pero de acuerdo a información que he recabado, la luz es más cara en las áreas “fancy” o “yeyé”, mientras que en los sectores populares es más económica.

Uno de los aparatos que más gasta electricidad es el aire acondicionado. Si lo tienes todo el día encendido para sobrevivir al calor, bueno, ten en cuenta que eso consume mucha luz. A mí no me quedó de otra que adaptarme al ventilador (o «abanico» como le dicen en Panamá) y encender el aire acondicionado sólo en los momentos de extrema necesidad, porque ni siquiera lo prendo todas las noches.

También puedes pensar en comprar uno que sea «Inverter» pero, ojo, el sistema inverter se diseñó pensando en equipos que pasan ocho horas o más encendidos de forma consecutiva, para que realmente ahorre. Por eso están recomendados para oficinas o habitaciones, no para, por ejemplo, que lo prendas un rato en la tarde y ya.

Con respecto a la nevera (refrigerador), sí, para ahorrar energía compra una con sistema inverter, igual evita abrirla mucho, o sea, ábrela una vez, saca lo que tengas que sacar y ciérrala. Es indispensable que esté llena, de esa forma gastará menos energía. Si no tienes para llenarla con comida, hazlo con muchas jarras o envases con agua. Lo mismo aplica para el congelador, siempre lleno con algo, así sea hielo.

Si tienes calentador de agua eléctrico, busca cambiarlo por uno a gas. En caso de que no puedas, sólo enciéndelo un rato antes de bañarte y ya. También es recomendable buscar acostumbrarse a bañarse con agua un poco más templada. Entiendo que cada persona y gusto es diferente pero al menos tratar de hacerlo, y ver si logras adaptarte a unos grados menos, tiene la ventaja adicional de que previene infartos… los que ocurren cuando llega la factura de la electricidad.

Lavadora y secadora. A menos que sea a gas, olvídate de la secadora. Cuelga la ropa en el medio de la sala o algo así, porque consume demasiada energía. En el caso de la lavadora, siempre utilízala a carga completa para que así ahorres electricidad… y agua.

Planchas de ropa. Plancha todo de una sola vez, evita usarla para “una camisa” o “un pantalón”, el tener que esperar que caliente y luego la energía residual perdida mientras se enfría hará que gastes mucha más electricidad, aparte, lo ideal es que planches cuando la ropa aún está húmeda, así el esfuerzo por alisarla será menor, tardarás menos y ahorrarás luz, además de eso, plancha primero la ropa de tela más gruesa y deja para el final la más delgada, así podrás hacerlo con el calor residual de la plancha.

Sobre los secadores de pelo, bueno, eso sí que es una decisión personalísima de mis queridas amigas las damas; pero igual les tocará elegir: Ser bellas o ver estrellas cuando les toque pagar la luz.

Además de eso hay otras cositas que son importantes, por ejemplo: Los cargadores de la laptop o los dispositivos móviles, siempre desconéctalos de la toma de corriente cuando no los estés usando. Igual olvídate de la costumbre de dejar el celular cargando en la noche cuando vas a dormir, porque los teléfonos nuevos se cargan en dos horas y el resto de ese tiempo lo que harás es gastar electricidad sin necesidad.

Cambia los bombillos por modelos que sean de LED y enciéndelos únicamente cuando estés en la habitación respectiva.

Desconecta el TV y el microondas cuando no los uses e incluso, si quieres extremar el ahorro, también desenchufa de la corriente el router y modem de cable e internet cuando no haya nadie en casa o a la hora de dormir. Si tu cocina es a gas, evita usar el microondas para cosas que pudieras hacer en la estufa, como calentar un poco de leche o una rebanada de pan.

En resumen, hay que ser medio paranoico con esto de la electricidad y, al final, el mejor consejo que te puedo dar es: Desenchufa todo lo que no estés usando, porque recuerda que casi todos los dispositivos electrónicos en la actualidad consumen un poco de energía al estar conectados y de poquito en poquito, suman unos cuántos dólares a la hora de que te llegue el recibo de luz.

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Enrique Vásquez